Para la exitosa pedalista Ana Gabriela Canto Rosales,  lo mejor es disfrutar cada momento en la bici, desde ver el atardecer, los flamingos, los paisajes y la comunidad que te regala el increíble deporte del  ciclismo.

Ana Gabriela nació el 17 de Noviembre de 1994 en la isla de Cozumel, Quintana Roo, y ahora pertenece al equipo «Rudas» de Mérida; comenzó a practicar deporte a las 8 años, en el triatlón, después cambió  a los 10 años al Atletismo y hasta los 16, en donde llegó a participar en regionales y competencias nacionales en Querétaro.

Posteriormente a los 26 años que conoció a su pareja, quien le invitó a andar en bicicleta de ruta, prestada al igual que el casco y licras; desde ese instante le gustó mucho el ciclismo, ya había salido en Cozumel algunas veces a rodar con bici  prestada, pero nada formal como cuando empezó aquí en Mérida a ir al pelotón y a la carretera.

Su primera competencia formal en ciclismo fue el MZ tour el 13 de Marzo del 2021,  ahí llevaba aproximadamente 3 meses entrenando, se llevó una gran experiencia compitiendo con chicas de la selección de México y se dedicó a entrenar más, el 29 de Marzo, «fue mi primera carrera en circuito y solo de mujeres ahí pude llevarme el primer lugar y me motive a seguir entrenando cada día más», comentó.

Son varios los momentos que más ha disfrutado, el terminar su primera carrera, ganar primer lugar por primera vez, romper sus metas de distancia y tiempo, pero creo que la mayor satisfacción es la que vivió el 6 de Marzo en la carrera de rudas donde mi pareja me propuso matrimonio en la meta al terminar la ruta.

«No entreno a nadie y yo por mi parte solo salgo a entrenar al pelotón, no llevo un entrenamiento especifico. Solo ganas y coraje de ser mejor; el ciclismo puede llegar a parecer un deporte para hombres, pero últimamente en Mérida somos una gran comunidad de mujeres ciclistas, me emociona ver que cada día seamos más mujeres y lo más importante es ser paciente con los resultados pero sobre todo divertirse» agregó Ana.

De anécdota nos comparte que empezó yendo a rodar con tenis para correr y todos usan zapatos con clips, entonces la primera vez que tuvo sus zapatos con clips le sucedió que , llegando a casa se cayó directo al jardín,  «No me quedo más que reírme y acordarme que lo primero es desenclipar» finalizó