Compartir

Es un fenómeno meteorológico que emite a la atmósfera unas mil millones de toneladas de polvo provenientes de las zonas áridas y semiáridas del norte de África. Estas partículas son arrastradas por las corrientes de viento a lo largo de siete mil kilómetros hasta llegar a América.

De acuerdo a la Comisión Nacional del Agua, las tormentas de arena que se producen en este lugar provocan que las cantidades de polvo se eleven hasta siete kilómetros, pero es durante el verano y a principios del otoño cuando una masa de aire muy seca se forma sobre este desierto. Esa masa es conocida como Capa de Aire del Sahara, SAL, por sus siglas en inglés.

Las corrientes de viento lo que provocan es que los polvos del Sahara se desplacen sobre el Océano Atlántico y lleguen hasta la zona del mar Caribe y Golfo de México.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *