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Combustible robado podría abastecer a un país centroamericano

México requiere estrategias específicas para el combate al robo del gas LP, pues 82% de las tomas clandestinas se concentran en 18 municipios que representan menos de 1% de los municipios del país; siguiendo con la inercia del reciente plan de seguridad del gobierno federal para combatir el alto índice de violencia, mediante acciones locales enfocadas en el 2% de los distritos más violentos, sugirió el Lic. Alejandro Desfassiaux, Presidente de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial. 

El país perdió el rumbo en el combate al robo de combustibles y en especial del gas LP, a pesar de que el gobierno actual arrancó con acciones contundentes en la materia, que se han ido diluyendo con el tiempo; pues actualmente el robo de este hidrocarburo se disparó 1,017% (de 215 a 2,402). “Al día se perforan siete tomas clandestinas de gas LP; 44 mil toneladas del combustible robado se comercializan cada mes y las pérdidas suman mil 100 millones de pesos mensuales; por lo que la situación ya es insostenible. Es tanto lo robado en México que podría abastecer completamente a un país centroamericano”, sostuvo el Lic. Desfassiaux. 

En sexenios pasados se perforaba una toma clandestina cada 2 días, sin embargo, en el actual gobierno se taladran 7 diarias; con un promedio anual de 2,555 puntos donde los huachicoleros se roban el combustible. 94% de tales perforaciones se concentran en Puebla, Estado de México, Tlaxcala y Veracruz; aunque solo el territorio poblano lleva 61% de las tomas clandestinas detectadas por Pemex. 

Con el actual plan de transporte terrestre de combustible en apoyo a Petróleos Mexicanos (PEMEX) de noviembre del año pasado a febrero de este año, la Guardia Nacional ha proporcionado 4,105 escoltas a 36,864 autotanques, materializando 878 rutas de abastecimiento; y pese a los grandes esfuerzos que está realizando esta institución, a los 740 mil litros recuperados en los últimos 6 meses, a su  constante incremento en su estado de fuerza, que rondará los 130,000 elementos para finales de 2022 y a los 151 cuarteles proyectados para el mismo periodo, sigue siendo insuficiente para eliminar este problema. 

La actividad de los huachicoleros ha llegado a tal grado que, hasta 20% del gas distribuido en el Valle de México es robado; cuyo impacto afecta a 4.6 millones de consumidores. A este respecto hay que reconocer que apenas a principios de este mes fue desarticulada una peligrosa banda dedicada al robo de pipas de combustible, cuyo insumo era puesto a la venta al menudeo en la alcaldía Álvaro Obregón, según informó la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX. 

En Hidalgo recién fue detectada una nueva modalidad para robar el hidrocarburo de los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) por parte de la delincuencia organizada, ya que pasó de realizar excavaciones a ras de suelo a hacerlas bajo el mismo, es decir, mediante túneles. Con dicho esquema hay menos margen para que las autoridades detecten una irrupción a la línea de distribución, ya que se hace por debajo o a los lados de la tubería y además se alejan más del sitio donde están los ductos. 

El nuevo modus operandi, detectado oportunamente por elementos del Ejército, fortaleció las operaciones de monitoreo a ductos en la entidad, a través de 1,087 militares desplegados en seis batallones de infantería y otro de la Guardia Nacional. El patrullaje comprende al menos 12 municipios y se recibe un promedio de 15 alertas al día en alguno de los 300 kilómetros de los ramales de ductos Tuxpan-Tula, Tuxpan-Azcapotzalco, Tula-Salamanca y Tula-Azcapotzalco.

La distribución ilícita está provocando un crecimiento de métodos coercitivos y de violencia, que usan los grupos delincuenciales que están tomando el control de este mercado, a través de vehículos robados o clonados y sin medidas de seguridad. Esto constituye una industria de distribución alterna, que aparenta ser legal, pero que sirve al comercio ilícito; y el consumidor no tiene manera de saber si la pipa que le ofrece los mejores precios vende combustible robado.

El experto en seguridad dijo que los grupos criminales están rápidamente apoderándose de los energéticos del país, por lo que no es de extrañar la reciente declaración del ex fiscal de Estados Unidos, William Barr en el sentido de que la actual administración ya perdió el control de México, que se suma a las recientes declaraciones del jefe del Comando Norte de Estados Unidos, Glen VanHerck, del jefe de la CIA, William J. Burns y de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris.

Adicionalmente a las acciones específicas del Gobierno Federal en el combate al gaschicol en los principales municipios afectados, se debe impulsar el desarrollo económico de estas comunidades y la UIF debe desarticular las finanzas de las células criminales, pues mientras esto no se integre a la estrategia, nada va a funcionar. El 25% de la población se encuentra en pobreza extrema y el 50% en situación de pobreza, mientras que se estima que la venta de huachicol deja ganancias de mil cien millones de pesos mensuales a los criminales. De modo que reducir este delito, dijo, depende de un plan integral que ataque todos los frentes, afirmó el Lic. Desfassiaux.

Lo deseable es que finalmente se institucionalice a la Guardia Nacional para evitar colusión de policías estatales y municipales con el crimen organizado. “Es una lástima que en el combate al gaschicol, así como a todos los demás ilícitos y violencia en el país, se deje solo al Ejército y la Guardia Nacional y ni las autoridades estatales ni las municipales coadyuven para resolver estas problemáticas. Para atacar eficientemente el problema del robo de hidrocarburos en México, hay que empezar por entender su origen primario, concerniente al desarrollo económico y prosperidad de las propias comunidades”, concluyó el Presidente de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial. 

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